Después de habernos preparado durante el Adviento, ahora celebramos el nacimiento de Jesús: la Palabra eterna de Dios asume nuestra naturaleza humana, el Dios eterno entra en el tiempo y nace el Salvador de todos los hombres. Como la Pascua, este tiempo tiene una octava: durante una semana sigue la festividad con la misma intensidad, aunque en el caso de la Navidad se admiten otras fiestas, conocidas como los “Tres acompañantes”: san Esteban, el primer mártir; san Juan, apóstol y evangelista, y los santos Inocentes, mártires. El domingo dentro de la octava......

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